Un enigma oculto bajo la histórica ciudad del Cusco ha comenzado a salir a la luz: arqueólogos peruanos aseguran haber detectado una red de túneles subterráneos que conectarían dos de los sitios más emblemáticos del Tahuantinsuyo: la fortaleza de Sacsayhuamán y el templo del Coricancha. Este hallazgo, resultado de estudios históricos y tecnología de georradar, revela cavidades de hasta 2.5 metros de profundidad y 1,750 metros de longitud, despertando nuevas teorías sobre la avanzada ingeniería inca.
Mencionadas en crónicas coloniales y rodeadas de leyendas, las chincanas de Cusco podrían haber sido rutas estratégicas, ceremoniales o incluso depósitos secretos. Ahora, con excavaciones previstas para abril de 2025, estas construcciones podrían cambiar nuestra comprensión sobre el diseño urbano y la espiritualidad de los incas, abriendo un capítulo fascinante en la historia subterránea de Cusco.
1. Detalles del hallazgo
El equipo detrás del descubrimiento
El hallazgo de la red de pasajes subterráneos que conecta Sacsayhuamán y el Coricancha ha sido liderado por dos arqueólogos peruanos destacados: Jorge Calero Flores y Mildred Fernández Palomino. Ambos profesionales cuentan con una larga trayectoria en investigaciones sobre urbanismo y arquitectura inca.
Tecnologías utilizadas en la investigación
Para confirmar la existencia de estas chincanas, el equipo empleó herramientas avanzadas como:
- Georradares: Estos dispositivos detectaron cavidades subterráneas con una profundidad que oscila entre 1.4 y 2.5 metros.
- Pruebas de sonido: Este método permitió determinar la extensión aproximada de las estructuras, que alcanzan hasta 1,750 metros de longitud.

Evidencias históricas respaldadas
Este descubrimiento no se originó solo de la tecnología. Los arqueológos se apoyaron en textos de los siglos XVI y XVII que ya mencionaban la existencia de túneles en Cusco:
- Garcilaso de la Vega: En sus crónicas, el Inca Garcilaso descrine pasajes subterráneos utilizados como rutas secretas y almacenes.
- Jesuitas y cronistas coloniales: Registros de esta congregación mencionan relatos orales sobre túneles que unían importantes centros ceremoniales y administrativos.
Una estructura compleja y enigmática
Las primeras mediciones indican que los túneles están revestidos con muros y techos de piedra perfectamente labrada, una técnica que refleja la sofisticada ingeniería inca. Por otra parte, las cavidades detectadas son lo suficientemente grandes como para permitir el paso de personas, lo que refuerza la hipótesis de que estas chincanas pudieron haber sido utilizadas con fines estratégicos o ceremoniales. Sin embargo, su verdadero propósito sigue siendo un misterio.

Próximos pasos: Excavaciones y permisos
Las excavaciones, próximas a realizarse en abril de 2025, no solo permitirán confirmar las características de los túneles, sino también determinar su extensión real y los materiales asociados. Se espera que este esfuerzo revele más sobre la organización territorial y las prácticas culturales del Tahuantinsuyo.
2. Contexto histórico y cultural
Sacsayhuamán y Coricancha: Pilares del Tahuantinsuyo
Ambos monumentos, Sacsayhuamán y el Coricancha, no solo representan la grandiosidad arquitectónica del Imperio Inca, sino que también reflejan su avanzada organización política, militar y espiritual.
Sacsayhuamán
Ubicada al norte de Cusco, esta imponente fortaleza es una muestra del dominio inca sobre la ingeniería y el diseño estratégico. Construida durante el reinado de Pachacútec en el siglo XV, sus enormes bloques de piedra, algunos de hasta 210 toneladas, encajan con precisión asombrosa.
Aunque su función principal era defensiva, también se utilizaba como un centro ceremonial. Hoy en día, Sacsayhuamán es famosa por ser el escenario del Inti Raymi, una festividad que honra al dois Sol durante el solsticio de invierno.

Coricancha
Conocido como el Templo del Sol, el Coricancha era el corazón espiritual del Tahuantinsuyo. Este lugar sagrado estaba dedicado al Inti, el dios Sol, y sus muros, revestidos con láminas de oro, reflejaban la importancia de la luz solar para los incas.
Tras la conquista española, se construyó sobre sus cimientos la Iglesia de Santo Domingo, pero los restos del templo original aún son visibles, evidenciando la grandeza del pasado incaico.

Las Chincanas: Entre la historia y la leyenda
Desde tiempos coloniales, las chincanas han alimentado relatos fascinantes que mezclan hechos históricos y mitológicos. Estas estructuras subterráneas, mencionadas por diversos cronistas, sugieren un uso estratégico y ceremonial.
- Fray Martín de Murúa (1590) describió un pasaje subterráneo entre Sacsayhuamán y el Coricancha, utilizado con fines ceremoniales.
- Anello Oliva (1600) mencionó la existencia de un laberinto subterráneo atribuido al Inca Huayna Cápac, que unía distintos puntos clave del Cusco.
Además, las chincanas están rodeadas de leyendas locales que hablan de tesoros escondidos y desapariciones misteriosas, lo que ha convertido a estas estructuras en un símbolo de los enigmas cusqueños. Segín la tradición oral, aquellos que intentaron explorar estas rutas sin preparación adecuado nunca regresaron, perpetuando su aura de misterio.
3. Cosmovisión inca y el significado de las chincanas
En la cosmovisión andina, el mundo subterráneo, conocido como Uku Pacha, tenía un significado profundo: simbolizaba el lugar de los ancestros, la fertilidad y el renacimiento. Las chincanas podrían haber sido una representación física de esta conexión espiritual, al unir el mundo terrenal (Kay Pacha) con el subterráneo a través de ceremonias y rituales.

Esta dualidad también se observa en la función de estos túneles: como caminos secretos para proteger al Inca como rutas sagradas que conectaban los principales centros ceremoniales. Asimismo, el reciente hallazgo confirma la capacidad de los incas para integrar ingeniería avanzada con su cosmovisión, destacando cómo sus creencias influían en el diseño de sus ciudades y estructuras.
Posibles funciones de las chincanas
Rutas estratégicas y militares
Algunos expertos sugieren que estas chincanas pudieron servir como vías de escape o comunicación secreta entre centros de poder, permitiendo el movimiento discreto de la élite inca en tiempos de conflicto. Esta hipótesis se basa en la ubicación estratégica de Sacsayhuamán y su conexión con el corazón religioso del imperio, el Coricancha.

Propósitos ceremoniales y rituales
Otra teoría propone que los túneles tenían una función ceremonial, pues facilitaban rituales que simbolizaban la conexión entre diferentes planos de existencia según la cosmovisión andina. La unión subterránea de dos lugares sagrados podría representar la integración de los terrenal con lo espiritual.
Almacenamiento y protección de objetos valiosos
También se especula que las chincanas pudieron haber sido utilizadas para resguardar tesoros, objetos sagrados o momias reales, protegiéndolos de posibles saqueos o desastres naturales. La construcción subterránea ofrecería un entorno seguro y discreto para tales fines.
4. Ingeniería inca: Una civilización avanzada
La existencia de las chincanas subraya la avanzada ingeniería y planificación urbana de los incas. La construcción de túneles de considerable longitud y complejidad, con técnicas que garantizaban su estabilidad y durabilidad, refleja un profundo conocimiento de la geología y habilidades arquitectónicas sobresalientes. Este hallazgo se suma a otras estructuras subterráneas conocidas en el mundo andino, como los acueductos de Nazca o los canales de riego en diferentes regiones, demostrando una vez más la capacidad inca para modificar y aprovechar el entorno en beneficio de su sociedad.

5. Nuevas perspectivas sobre el Tahuantinsuyo
El descubrimiento de las chincanas entre Sacsayhuamán y el Coricancha ofrece una oportunidad para reinterpretar la organización territorial y el simbolismo incaico. La interconexión de estos centros neurálgicos sugiere una integración funcional y espiritual más profunda de lo que se pensasba, indicando que Cusco no solo era el centro político y ceremonial del imperio, sino también un núcleo de redes subterráneas que facilitaban diversas actividades esenciales para la cohesión del Tahuantinsuyo.
Este hallazgo invita a una reevaluación de las narrativas históricas sobre la infraestructura inca y plantea interrogantes sobre otras posibles chincanas aún por descubrir, que podrían revelar más sobre la complejidad y alcance de esta civilización.
Los tesoros de Cusco que aún esperan ser revelados
El hallazgo de las chincanas que conectan Sacsayhuamán con el Coricancha abren una ventana al pasado, permitiéndonos comprender mejor la planificació territorial y la espiritualidad de los incas. Este descubrimiento no es solo un recordatorio de su legado, sino una invitación a seguir explorando los secretos que aún esconden bajo la ciudad imperial del Cusco.
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