Leyendas del Perú: Las chinkanas de los Incas

En el Perú y en todo el mundo, existen mitos y leyendas referidas a los misteriosos túneles subterráneos o como se le conoce en el país: “las chinkanas”, que son unas cuevas o laberintos que se encuentran en las profundidades de la tierra y que hasta nuestros días aún no se han descubierto y menos explorado todas las existentes.

Nuestro título es un tanto sugerente, quisimos llamar tu atención, en realidad no se puede atribuir con certeza de que los incas hayan construido las chinkanas en Perú, algunos estudios realizados dan cuenta que son muy anteriores a los incas, que hasta ellos ingresaban con un guía a las chinkanas porque no conocían todos sus caminos.

Prepárate, porque nos adentraremos a un mundo subterráneo que esconde misterios y tesoros ocultos custodiados por guardianes, donde  muchas personas desaparecieron en su afán de descubrir sus enigmas, donde ya se realizaron estudios concretos comprobando su existencia en el Cusco, descubriremos quienes son los investigadores que se obsesionaron con estos túneles y absolutamente todo lo que implica este misterio donde investigadores, religiosos y el gobierno peruano tuvieron participación.

La “piedra cansada”, guarda debajo un acceso a los túneles subterráneos

¿Cómo surgió la fantástica leyenda de los túneles subterráneos o chinkanas en el Perú?

Precisamente fue gracias a las leyendas, estas tradiciones orales que perduran en el tiempo y que en sus relatos hay algo de verdad. Muchas de estas historias narraban la historia de las chinkanas y de las personas que entraron en ella, donde la mayoría no encontraba la salida y se perdían para siempre en los laberintos de las cuevas. 

El Inca Garcilaso de la Vega, en su libro “Los Comentarios Reales” ya mencionaba a las chinkanas de Sacsayhuamán en el Cusco durante el imperio incásico, señala Garcilaso que los mismos incas no entraban sin guía a las profundidades de los túneles, ya que muchos pasajes eran desconocidos y existía el temor de perderse. Cronistas de la época señalaban también la existencia de túneles, que atravesaban la ciudad del Cusco y que algunos de los caminos intraterrenos llegaban a otros lugares del Perú, como Puno o Cajamarca. 

Fue tanta la popularidad de esta leyenda que empezaron a tejerse sorprendentes historias alrededor de las misteriosas chinkanas, llegaron de otras partes del mundo a querer averiguar si el mito tendría algo de verdad, y si, ¡Se lograron descubrir historias que hasta el momento eran desconocidas!

Ingreso a las pequeñas chinkanas ubicadas en la “Zona X”, cerca a Sacsayhuamán

La mazorca de oro encontrada en la chinkana

Lo que leerán a continuación, es para muchos un cuento más, algo de lo cual no hay pruebas; sin embargo existen evidencias concretas y personajes que revelaron este misterio que aún se comparte por niños y ancianos en la ciudad del Cusco, de la que probablemente sea la leyenda más popular de la ciudad imperial.

Todo inicia con la historia de tres estudiantes universitarios que ingresaron a la “Chinkana Grande” cuyo acceso era por la parte de atrás de Sacsayhuamán, más exactamente debajo de una enorme roca llamada la “piedra cansada”; tiempo atrás algunos curiosos habían ingresado y nunca lograron salir, cuentan que entraban con sogas haciendo una línea que amarraban a un árbol cerca al ingreso, pero no servía de nada, las linternas adentro se apagaban, la oscuridad total era la compañía de aquellos aventureros que intentaban explorar la chinkana grande.

Volviendo a nuestra historia, estos 3 estudiantes ingresaron a la chinkana, dos de ellos corrieron la misma suerte de los anteriores exploradores, nunca salieron, sin embargo uno de ellos logró salir… ¡Leyeron bien! Hubo un sobreviviente y salió por un lugar inesperado. 

El Templo de Santo Domingo o “Coricancha” guarda enigmas

…El Qoricancha guarda la entrada a un mundo subterráneo 

Debajo del altar mayor del Templo de Santo Domingo o Qoricancha en el Cusco, durante una misa dominical, los asistentes oyeron golpes que venían del suelo, después de sacar algunos maderos del piso del altar observaron con sorpresa a una persona de aspecto delgado y con una barba larga; estaba ahí sujetando en el brazo una ¡mazorca de oro!, su estado de salud era muy delicado. 

Después de unos días falleció, dejando la mazorca como prueba de que en las chinkanas podría esconderse un gran tesoro inca ¿Por qué inca?

Sencillo, porque en el Qoricancha, antiguo templo del sol de los incas existía un jardín donde habían réplicas en oro de sus principales alimentos, de animales y de personas; era un espacio sagrado, y algunas historias afirman que los incas al enterarse de la llegada de los españoles y su codicia por el oro, escondieron en las bóvedas de las chinkanas todos sus tesoros, y estos tesoros continúan escondidos debajo del templo de Santo Domingo.

Estas tablillas se deben a las excavaciones en el interior de la iglesia de Santo Domingo

Javier Sierra y su investigación en el Cusco

La historia de la mazorca de oro y la chinkana tuvo mucha popularidad, tanto así que a inicios de los años 90, llegó al Cusco el escritor e investigador español Javier Sierra, fue él quien desentierra el mito y lo convierte en realidad, relatando a detalle su travesía en la ciudad en su libro “En Busca de la Edad de Oro”.

El Prior del Templo de Santo Domingo de aquella época, el Padre Benigno Gamarra fue trascendental, él le dijo que la historia era cierta y llevándolo a una de las habitaciones del convento le mostró dos coronas de oro puro, y confesó que los padres dominicos habían decidido fundir la mazorca de oro y convertirla en coronas para la virgen y su niño.

El Padre después dirigió a Javier Sierra por una de las criptas que conectaba al ingreso de la chinkana grande, el escritor narra que si había un ingreso que se hacía más ancho y perdía el sendero hacia arriba. 

Quiso atravesar el muro de ladrillos deteriorado que cubría parte del ingreso pero el Padre no se lo permitió, le dijo que hoy ya había tenido mucha suerte… No hay duda que fue un día afortunado para el investigador español. Si quieres saber todos los detalles de esta historia te recomendamos buscar su libro, el cual comprueba la veracidad de las chinkanas del Cusco.

Un libro que describe las investigaciones realizadas por Javier Sierra

El “Proyecto Qoricancha” comprueba la existencia de la Chinkana

Mantengámonos en el Qoricancha, para el año 2001, Anselm Pi Rambla (coincidentemente español), después de una milagrosa hazaña, logra obtener los permisos para realizar excavaciones y estudios para comprobar científicamente la existencia de estas cuevas en el Cusco. 

En la iglesia del convento se realizan excavaciones al igual que en la zona de la piedra cansada en Sacsayhuamán, así mismo con georadares que servían para localizar aberturas o anomalías  en el subsuelo exploraron el camino que iba en línea recta desde la parte alta de Sacsayhuamán hasta el templo del Qoricancha, atravesando por los templos más conocidos de la ciudad (San Cristobal, Catedral del Cusco, Monasterio de Santa Catalina, Qoricancha…)

El equipo “Bohic Ruz Explorer” dirigido por Anselm Pi Rambla, después de un trabajo, que lamentablemente se interrumpió a causa del reclamo de los padres dominicos quienes alegaban que con las excavaciones estaban deteriorando parte del convento de Santo Domingo, lograron comprobar que si existe un túnel subterráneo que atravesaba la ciudad, en el informe final del proyecto se describe a detalle los resultados obtenidos.

Un dato curioso es que el explorador español se convenció de realizar el proyecto al ver la fotografía que le mostró Javier Sierra de las coronas de oro y le narró la increíble historia que había vivido en Cusco. Finalmente Anselm Pi Rambla dejó el Cusco, por cuestionamientos de algunos personajes de la ciudad, sin embargo aún mantiene el deseo de volver al Cusco y retomar su proyecto.

Anselm Pi Rambla, acompañado de la Reina de España y la Primera dama de Perú, en el Cusco

Una red de caminos subterráneos que recorre Sudamérica

Nos vamos quedando cortos, esperamos realizar una segunda parte referida al misterio de las chinkanas, y todos los caminos a donde lleva. Varios expertos plantean la hipótesis de que esta red subterránea se relaciona con sitios sagrados de tiempos antiguos, como la Cueva de los Tayos en Ecuador, el portal de Aramu Muru en Bolivia, el lago Titicaca, o el legendario Paititi oculto en la selva amazónica de Sudamérica.

Se sugiere también que las chinkanas aún guardan tesoros importantes como el disco solar de oro de los incas y que sus accesos están custodiados por “mallquis” o guardianes intraterrenos, quienes fueron designados para su protección; en fin por el momento solo sabemos que las leyendas son ciertas, aún falta mucho por descubrir, es una aventura tentadora que nos puede llevar a encontrar las respuestas a nuestros orígenes.

Si te gustó la historia de la chinkana, quieres saber más y ver con tus propios ojos la evidencia de su existencia, visita el Perú con nosotros, en Viagens Machu Picchu tenemos los mejores paquetes de viaje hacia la tierra de los incas, ponte en contacto con nuestros operadores de viaje para más información.

Actualmente existe este pequeño acceso que baja hacia las profundidades de la chinkana, en la piedra cansada

Deixe uma resposta